¡Ops!...llegó el verano y nos olvidamos de la "operación bikini"...

Parecía imposible pero el verano llegó mostrando todo su poderío con temperaturas de 30º, un sol que más que brillar quema y un montón de mosquitos invisibles (porque yo no los veo cuando me pican) que han visto en mi su mejor lienzo, porque mis pobres piernas empiezan a parecerse más a un Picasso que a unas piernas de verdad. Supongo que es lo que tiene andar entre fruta y azúcar todo el día, empiezas a convertirte   en otro objeto "dulce" para ellos.

Pero bueno, todo sea en pro de que con el sol han vuelto las caras felices de muchos vecinos que ya ansiaban esos rayitos dorados que, sin quererlo, suben los ánimos como la espuma y cargan las pilas como nada para empezar con ganas el día. Y sino que se lo digan a nuestras frutas y hortalizas, a las que solo nos falta bailarles sevillanas o muiñeiras (por aquello de hacer patria gallega) para que crezcan más rápido y con más sabor. Porque después de esta primavera tan lluviosa y ventosa, tenemos que darles todos los mimos posibles a los frutales y hortalizas que resistieron como espartanos.

Vista de la huerta

Tomates

Con tanto calor, el helado esta a la orden del día porque nos encantan pero, si ya le añadimos un poco de mermelada...¡madre del amor hermoso!, os recomendamos el helado de nata con un poco de mermelada de fresa o cereza, esa combinación no es la gloria ¡es la requetegloria! y para las que quieran cuidar un poco la línea os recomendamos queso fresco con mermelada de albaricoque ¡buf! ¡buf! y ¡más buf! ¿quién dijo que cuidarse no fuera estupendo? ;). Es una lástima no tener una foto a mano para enseñárosla pero, tampoco voy a negar que, en la casa de Abuela a los 20, ¡ambas cosas vuelan!.

Mermeladas ¡Mmmmmm! de Abuela a los 20

Finalmente deciros que este calor, nos recuerda a la playa, a los bañadores y, sobre todo, a la "operación bikini" que nunca hicimos pero que tampoco nos hace falta porque si algo nos ha enseñado nuestra nueva vida en el campo, ha sido querer lo natural y lo que hace de cada tomate, cebolla o fresa, algo único...¿y porqué no empezar a sentirnos también únic@s? ¿porque no ver lo maravillos@s y guap@s que somos como nosotras (Abuela a los 20) vemos al resto del mundo?...así que con estas preguntas que, curiosamente, explican también nuestra filosofía de la estética interior y exterior, nos despedimos; pero no, sin dejaros éste vídeo que hemos encontrado y plasma todo lo que acabamos de decir (por si hay alguno que no ha interiorizado bien el mensaje ;D).

                                                             ¡Qué disfrutéis del verano!